Los pilares estructurales son vitales, ya que sostienen el techo y proporcionan un marco para mantener intactas las ventanas. Estos soportes en ángulo vertical están etiquetados en orden alfabético como pilares A y B a medida que nos movemos de la parte delantera a la trasera del vehículo. Mientras que el pilar A conecta el capó al techo y delimita los lados del parabrisas, el pilar B forma un lado del marco de la ventana para la primera puerta desde la parte delantera del automóvil, aunque puede tener varias configuraciones según el tipo de vehículo. Debido a su importancia para proporcionar protección contra vuelcos al vehículo en caso de colisión, los pilares A y B suelen estar hechos de acero de alta resistencia. Se requiere que los materiales utilizados en la fabricación de estos pilares posean una alta resistencia al colapso y la capacidad de absorber la energía cinética de un impacto en la cabeza. Para satisfacer los requisitos gemelos de alta resistencia al colapso y capacidad de absorber una gran cantidad de energía cinética, se añaden espumas o nervaduras estructurales a la moldura rígida. Los nervios estructurales tienden a ser menos costosos que las espumas, ya que pueden moldearse por inyección como una sola pieza; sin embargo, la tecnología actual requiere aproximadamente 25 mm de espacio de compresión. Varios fabricantes de automóviles han incluido airbags de cortina debajo de las cubiertas de los pilares A y B. Como resultado, se tienen en cuenta consideraciones de diseño adicionales para garantizar el correcto funcionamiento de estos airbags cuando sea necesario desplegarlos. Dado que el traumatismo craneoencefálico figura entre las principales causas de muerte en accidentes de tráfico, los fabricantes de automóviles han realizado esfuerzos para diseñar el revestimiento rígido de manera que se minimice el riesgo de tales lesiones. Esto ha sido reforzado aún más por la Norma Federal de Seguridad de Vehículos Motorizados (FMVSS) No. 201, que proporciona criterios de seguridad para las partes interiores del vehículo. Según esta norma, los componentes interiores superiores de los vehículos deben tener un valor de criterio de lesión en la cabeza (HIC) de 1000 o menos, el valor de HIC basado en la aceleración en el centro de la cabeza durante una colisión, y debe mantenerse para varios ángulos de impacto diferentes. Teniendo en cuenta la proximidad de los pilares A y B a las cabezas de los pasajeros de un vehículo, se ha prestado atención a las cubiertas utilizadas para estos pilares. Por lo general, se utilizan mezclas de PP (puro o mezclado con paja de trigo), PET y PET-PA para tales recubrimientos.